- ¿Cuál es mi tarea mas importante como madre? ¿Es acaso no pasar mi surcos a mis hijos?
En realidad lo más importante es la expansión de tu propia conciencia y el sanarte a ti misma. Así, comenzarás a tomar nuevas elecciones, que vienen del amor incondicional y no del amor que manipula.
Así es tu propia conciencia, y puedes confiar en cada una de tus elecciones; eso es lo que necesitas hacer. No empieces con eso de:
“ah! pero ellos son perfectos exactamente como son”.
¡Y mientras tanto están robando un banco! ¿Entiendes?
En realidad lo más importante es la expansión de tu propia conciencia y el sanarte a ti misma. Así, comenzarás a tomar nuevas elecciones, que vienen del amor incondicional y no del amor que manipula.
Así es tu propia conciencia, y puedes confiar en cada una de tus elecciones; eso es lo que necesitas hacer. No empieces con eso de:
“ah! pero ellos son perfectos exactamente como son”.
¡Y mientras tanto están robando un banco! ¿Entiendes?
- Antes, mi hija se caía, se lastimaba, yo me ponía nerviosa y le gritaba. Yo cambié y ya no le grito, entonces ella está confundida, esperando que yo reaccione como antes, ¿qué puedo hacer?
Pues sólo dile la verdad. Dile que antes hacías eso pero que has cambiado, que ella puede cambiar también y que mamá ya no le gritará.
Encuentro muy difícil hacer algo un cien por ciento. Generalmente comienzo un proyecto lleno de inspiración, y luego lo dejo sin terminar. ¿Cómo puedo romper ese patrón?
Cuando comencé a experimentar conciencia, todo lo demás se tornó irrelevante. Lo único que yo quería era más conciencia, más conciencia. Nada del afuera me podía dar plenitud.
Esa fue mi experiencia. Para ese entonces yo ya había hecho todo lo que había querido. Había seguido mis previas pasiones un cien por cien y las había agotado, de modo que cuando encontré conciencia, fue todo lo que quise.
Me volví más apasionada por esto que por cualquier otra cosa, pero siempre fui apasionada con lo que hacía, y siempre supe exactamente qué es lo que quería hacer; le di a todo un cien por ciento.
Cuando encontré conciencia, no había nada que se le pudiera comparar. Dejé mi música, dejé los caballos, lo dejé todo, porque ésta era mi absoluta pasión.
Tienes que encontrar tu pasión.
Y si aún no sabes cuál es, ¡¡¡juega a todo!!! No tienes que casarte con ello, solo lo haces un cien por cien, y luego, si no te gusta, puedes hacer otra cosa.
Esta creación es ilimitada. ¡Juega; es solo un juego! No tiene que ser algo permanente. Porque no tiene nada que ver con quien tú eres.
Y entonces, un día, querrás saber quién eres.
FOTO MIA HOY AL ATARDECER EN EL ASHVA.
Pues sólo dile la verdad. Dile que antes hacías eso pero que has cambiado, que ella puede cambiar también y que mamá ya no le gritará.
Encuentro muy difícil hacer algo un cien por ciento. Generalmente comienzo un proyecto lleno de inspiración, y luego lo dejo sin terminar. ¿Cómo puedo romper ese patrón?
Cuando comencé a experimentar conciencia, todo lo demás se tornó irrelevante. Lo único que yo quería era más conciencia, más conciencia. Nada del afuera me podía dar plenitud.
Esa fue mi experiencia. Para ese entonces yo ya había hecho todo lo que había querido. Había seguido mis previas pasiones un cien por cien y las había agotado, de modo que cuando encontré conciencia, fue todo lo que quise.
Me volví más apasionada por esto que por cualquier otra cosa, pero siempre fui apasionada con lo que hacía, y siempre supe exactamente qué es lo que quería hacer; le di a todo un cien por ciento.
Cuando encontré conciencia, no había nada que se le pudiera comparar. Dejé mi música, dejé los caballos, lo dejé todo, porque ésta era mi absoluta pasión.
Tienes que encontrar tu pasión.
Y si aún no sabes cuál es, ¡¡¡juega a todo!!! No tienes que casarte con ello, solo lo haces un cien por cien, y luego, si no te gusta, puedes hacer otra cosa.
Esta creación es ilimitada. ¡Juega; es solo un juego! No tiene que ser algo permanente. Porque no tiene nada que ver con quien tú eres.
Y entonces, un día, querrás saber quién eres.
FOTO MIA HOY AL ATARDECER EN EL ASHVA.
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